Cada vez son más las empresas y organizaciones que se suman al uso de la Inteligencia Artificial (IA) y Machine Learning (ML) como herramientas para mejorar la eficiencia de sus diferentes procesos de negocio. Aunque las inversiones en tecnologías sin foco en la optimización de costes o la continuidad de negocio están sufriendo cierto aplazamiento por la pandemia, la curva de adopción de tecnologías de IA y ML sigue siendo ascendente, y según algunos informes de analistas del sector, se estima que en el 2025 la inversión actual de las empresas se multiplique por 9, llegando a +50K Euros.
En el escenario actual de exuberancia de datos generados, obtenidos y almacenados (Big Data), resulta evidente la necesidad de disponer de herramientas y tecnologías como IA y ML que nos ayuden a gestionar esta ingente cantidad de datos de manera eficiente, ya que de otra forma sería imposible manejarlos y sacar partido de ellos.
Las soluciones basadas en estas tecnologías han dejado atrás su posición de herramientas de futuro y son ya presente. A diferencia de soluciones tipo ERP, CRM, SCM, MES, … su adopción, puesta en marcha y retorno de inversión es prácticamente inmediata, y pueden convertirse en un aliado clave para mejorar todas las áreas de negocio. En el ámbito comercial por ejemplo, se consiguen predicciones muy precisas del comportamiento futuro de clientes y prospectos, lo cual garantiza en un periodo de tiempo muy reducido, un incremento de ventas y una reducción de costes muy significativos.
Es importante no caer “en la inacción por el análisis” y en vez de esperar a ver cómo lo utilizan los demás, adoptar cuanto antes estas soluciones para poder ser más eficientes y competir mejor, especialmente en este periodo de recuperación económica post-pandemia.